Las grietas de Jara

Opinión:

Claudia Piñeiro es una escritora argentina que ya ha publicado varias novelas. En el año 2009 escribió "Las grietas de Jara" con la que ganó, en 2010, el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, esta novela ya fue publicada por Alfaguara en 2009 pero ahora en 2018 se vuelve a reeditar coincidiendo con el estreno de la película dirigida por Nicolás Gil Lavedra e interpretada entre otros por Óscar Martínez  y Santiago Segura.

La novela es una gran metáfora. Estas grietas que aparecen en el título hacen referencia tanto a las físicas (las de los edificios) como a las psíquicas, a las que afectan a las personas. Unas grietas que, también, invaden el matrimonio de Pablo y Laura trastocando un poco al primero. Esta carga psicológica es fuerte en el personaje de Pablo. Como protagonista lleva todo el peso de la novela, no sólo debe de hacer frente a los problemas, a las grietas, que surgen en su matrimonio sino a algo que sucedió tiempo atrás y que ahora reaparece sin esperarlo.

El resto de los personajes también son muy interesantes. Llama la atención Francisca, la hija de Pablo y Laura, la relación con su padre es bastante especial y lo demuestra cuando empieza a tener dudas sobre su sexualidad. La reacción del padre es bastante diferente a la de la madre y llama la atención. Otro personaje clave es Leonor que será quien desconcierte a Pablo por algo que sucedió con una persona a la que busca: Nelson Jara.

Hay mucha intriga en esta novela. La parte psicológica juega con el thriller y la hace muy interesante. Claudia Piñeiro tiene una forma de escribir y comunicar bastante peculiar. Logra que el lector tome partido por los personajes y se involucre en la trama donde también está presente la corrupción. Es un buen retrato de la situación en Argentina.

"Las grietas de Jara" transcurre en Buenos Aires. Como es lógico sus personajes hablan como se habla allí. El castellano que utilizan es el argentino, no se ha modificado ni adaptado al castellano nuestro. Esto me parece muy positivo, soy partidaria de mantener y respetar el habla de cada zona.

Creo, por todo ello, que es una lectura a tener muy en cuenta. Siempre da gusto conocer lo que se hace, a nivel literario, más allá del charco y Claudia Piñeiro es un buen ejemplo de la nueva literatura argentina,

Ysabel M.