La tía Tula

Opinión:

Miguel de Unamuno se encuadra dentro de la enjundiosa Generación del 98, aquella formada por una serie de escritores profundamente afectados e influenciados por el desastre del 98, en que España perdió sus últimas colonias ante Estados Unidos. Posiblemente él no fue de los más famosos dentro de la generación, pero su huella permanece intacta en la memoria de la literatura española. Importante figura tanto a finales del siglo XIX como durante el primer tercio del siglo XX, destacó como filósofo y escritor, experimentando con géneros tan diferentes entre sí como poesía, novela, teatro o ensayo. 

"La tía Tula" no representa su obra más emblemática. Aun así, está catalogada como una de las mejores novelas españolas del siglo XX. En ella Unamuno explora el mundo de la religión y del amor, fatalmente vinculados. Muy crítico con las concepciones eclesiásticas, donde la mujer siempre ocupaba un eslabón (o dos) inferior al hombre, la novela presenta un reproche contra matrimonios como el sororato o el levirato, prácticas habituales a la sazón y que privaban a la persona de tener la suficiente libertad para escoger "al amor de su vida". 

A pesar de etiquetarse como una novela (o nivola, como la definió el mismo Unamuno tras elaborar "Niebla"), se asemeja más a una obra de teatro, casi desprovista de narración o marcos descriptivos. Abundan los diálogos, omnipresentes en cada una de las páginas. La tía Tula, o Gertrudis, acaparaba casi todos ellos, una mujer casta y pura con tribulaciones amorosas en su corazón pero con la convicción de mantenerse una mujer que no se inclina a prácticas como el levirato. Con tal de convertirse en madre y matriarca sin tener que concebir, se empecinará en mandar sobre los hombres y en dotarle a la familia de significado y valores.

Su lectura se realiza con suma facilidad y rapidez, debido al constante discurrir de diálogos y a la presentación de un tema que, aunque simple y sencillo, engancha. Carente de acción, las emociones, las decisiones y los pensamientos agarran el timón de una novela que un gran lector no debería perderse. Antes de que éste se cerciore, se encontrará absorto en el mundo diferente de la tía Tula e impresionado por el carácter impetuoso y tesonero de una mujer deslumbrante. 

Cristià Serrano