La niña que no podía recordar

Opinión:

No imaginaba -porque estas cosas nunca las sabes- que ésta sería mi novela preferida de Clara Tahoces. De ella leí antes las novelas "Gothika", "Diario de un hada" y "El otro".

Creo que se le nota la experiencia, que va creciendo como escritora y acertando en la estructura (no digo también en el argumento porque precisamente los argumentos de sus novelas me encantan), y lo digo porque ésta se vuelve más intensa conforme avanza, pasan más cosas -aunque al principio no lo parezca- y con más personajes, o al menos esa impresión he tenido yo.

"La niña que no podía recordar" engancha, y bastante, gracias a su forma narrativa, ágil, amena, sin olvidar de vez en cuando agradar a nuestros ojos con frases algo líricas.

Las historias ocurren en dos tiempos, cuando Sandra es pequeña y cuando es adulta, pero a la vez se introduce -en la actualidad- la voz astral de su padre, y lo hace en primera persona, rompiendo la estructura utilizada hasta el momento, pero sin molestar. De hecho resulta atractivo aunque rompa esa estructura antes homogénea.

Sandra, de niña, ve algo que le hace rechazar a su padre y bloquear su memoria. Esta historia se une a la de un objeto maldito, y ambas se entrecruzan constantemente, apareciendo en escena fanáticos religiosos -no necesariamente siempre cristianos-, asesinos -y por tanto peligros-, lo que la hace una novela con bastante acción. Como digo, al principio no lo parece e incluso tienes la impresión de que se repite a veces, pero cuando entra en materia, cuando llega a la actualidad, viene la acción y ahí es cuando cuesta despegarse de la novela.

La niña -la hija de Sandra- es un atractivo importante en la novela, una baza fuerte. Su enfermedad (narcolepsia) es el vínculo perfecto para la resolución, pero me ha gustado mucho que no sea sólo eso, si no que también sea sensitiva y aparezca algún momento de esos que te ponen la piel de gallina.

Creo que le puede gustar a mucha gente esta historia, porque no es sólo evadirse, es también conocer un poquito sobre algunos temas intrigantes y curiosos como la narcolepsia, el culto a Lucifer, el bloqueo mental, el coma, los viajes astrales -en este caso condicionados por el coma, un viaje astral normal y corriente puede llevar a alguien mucho más lejos-, la lucha personal incluso entre el bien y el mal, etc.

Si os gustan los misterios y el thriller, podéis anotar este título en vuestras próximas lecturas, porque aunque no sea género negro típico, tiene finalmente el punto de acción propio del thriller. El desenlace es más típico del fantástico-terror, así que podéis añadirle varios géneros amenos e interesantes.

Anika Lillo

Foto homenaje (leyendo la historia de un objeto maldito justo delante de otro objeto maldito, un cuadro de Bruno Amadio de su colección de niños lllorones):