la canción del silencio
Título: la canción del silencio
Título Original: (la canción del silencio, 2010)
Autor: Leara Martell
Editorial:
Aladena
Copyright: Imagen cubierta: Clara Rodríguez
© 2010, Editorial Aladena SL
© 2010, Leara Martell
1ª Edición, Mayo 2010
ISBN: 9788492551026
Etiquetas:
autores
drama
dramática
dramático
enfermedad mental
enfermedades mentales
escritores
españoles
hispanos
literatura española
literatura hispana
malos tratos
maltrato
mente
violencia de género
Argumento:
Aída se despierta en una celda, está confusa, pero aún más cuando su abogado le dice que está allí por haber asesinado a su marido. Ella lo niega, adoraba a su marido, físicamente es demasiado pequeña para haber conseguido acabar ella sola con Carlo Delveccio, un gigoló alto, escultural, apuesto y rico, habitual en la prensa rosa.
Además, si su matrimonio era tan perfecto ¿por qué todo apunta a ella? Aída era una mujer maltratada, y el caso podía ser el típico de venganza por los malos tratos contra su persona.
En el juicio aparecen tres personajes que hablarán a su favor: la prostituta Violeta, el enfermero Bruno, y Canio. Ellos serán la voz de quien no miró a otro lado cuando todo ocurría.
Opinión:
“La canción del silencio” no es un libro para echarse a llorar en un mar de lágrimas a pesar de los maltratos descritos, no es marcadamente emotiva, pero sí tiene un punto reivindicativo muy importante y una resolución muy estudiada que es lo que le da valor a la obra. Si todos miran a otro lado, alguien tiene que velar por la mujer maltratada. Ahí es donde aparecen Violeta, Bruno y Canio.
El título de la obra hace referencia a la técnica de la huida mental a la que recurre mucha gente cuando está en una situación horrible. Para Aída la ópera será su refugio, pero no sólo la música le servirá, claro que el resto está a disposición de la trama para llegar a su espectacular final.
Al principio la lectura es confusa, pero también éste es el estado de la protagonista, por lo que sospechas que ambos aspectos están relacionados. Nada es gratuito en “La canción del silencio” aunque lo parezca. También es cierto que cuando acabé la novela hice un repaso para ver cómo había unido los hilos sin destapar secretos o dejar agujeritos, y es que esa sensación de confusión –en la lectura y en la protagonista- te llevan a mirar con ojos muy críticos los hechos que narra.
Es por eso, quizás, que el papel de la fiscal Lidia Reyes me resultó mucho más atractivo al finalizar el libro que mientras lo leía.
El final, que es la gran sorpresa de la novela, me ha obligado a repasar de nuevo toda la lectura para buscar posibles fallos en su narración, cabos sueltos que puedan estropear el remate de la obra, y me ha sorprendido que Leara Martell haya sabido encauzar los capítulos de tal modo que tenga la sartén por el mango. Ha logrado engañar al lector para poder darle una sorpresa definitiva. El recurso y el final no son gratuitos tampoco, llevan un trabajo elaborado y le ha salido muy bien. Como estreno sugiere un buen comienzo a esta nueva novelista.
Anika Lillo
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