Historia de una enfermera

Opinión:

Tal como se plantea en la contraportada, junto con las vicisitudes que puedan ocurrir a los personajes, "Historia de una enfermera" muestra sobre todo la realidad, el día a día de una profesión que ha recibido diversas denominaciones, no siempre bien aceptadas, además de consideraciones dispares según de donde viniesen: Enfermería.

Vale que ahí caben personas de todo tipo y condición, y que visto desde fuera el factor determinante para la impresión que se perciba será la atención recibida; a veces mejor, otras no tanto, que hay muchas circunstancias en juego, incluso dentro del ámbito sanitario, como recortes asistenciales que siempre repercutirán en quienes más lo necesitan: los pacientes.

Aun así, lo que siempre será cierto es que son personas que dedican su vida al cuidado y la recuperación de la salud de las personas que tienen encomendadas, intentando además que no decaiga el ánimo por muchas dificultades que se atraviesen o simplemente porque habrá ocasiones en que se podrá hacer poco más que paliar el sufrimiento hasta el final.

Si al principio las protagonistas son dos, al poco destaca la figura de Marian, que es quien lleva el peso de la historia y se enfrenta con todo el ímpetu de su personalidad a cada problema que aparece con los pacientes, con los compañeros de trabajo o con su pareja. En lo que sí ambas coinciden es en que cuando son la voz narradora lo hacen en primera persona.

Junto con ellas aparecen de tanto en tanto otros personajes relacionados con Marina o Marian y que muestran unos puntos de vista diferentes, ya que están relacionados con ellas de otra manera, a veces sanitaria, otras personal o también una mezcla de ambas. En esos incisos, la expresión cambia a tercera persona, a la vez que también están identificados en el encabezado da cada capítulo.

El recorrido por las vidas de Marina y de Marian es intenso y, muchas veces, sus propias vivencias emocionan al lector, que verá en estas páginas una realidad que a menudo pasa desapercibida por más que sea fundamental en que la sanidad funcione, sobre todo para el paciente que esté a su cuidado.

Una gran novela, muy bien desarrollada por Lola Montalvo, que hace vivir al lector unas historias sencillas, complejas, interesantes. En definitiva, humanas.

Selin