Hijos de los hombres

Opinión:

M. Zeta

"Hijos de los hombres" es la primera de las obras de la escritora británica P. D. James que no pertenece al género policíaco por el que es conocida. La novela está catalogada dentro del género de ciencia ficción.

La historia que nos cuenta está dividida en dos partes: libro I. Omega, que consta de un diario personal que abarca de enero a marzo de 2021, y libro II. Alfa, en el que el diario es del mes de octubre del mismo año. Cada parte incluye también capítulos que no forman parte del diario y están narrados en tercera persona. El relato está ambientado en el año 2021, que junto con el año 1995, que es el último año en el que nacen niños en la tierra, son las fechas más importantes del texto. Lo que me llamó la atención, es que la primera edición fue en el año 1992, por lo tanto, para los lectores de esa época, la trama estaba ambientada en el futuro. Para nosotros, ese tiempo ya ha pasado, pero lo mejor de todo es que la narración se sostiene, no ha envejecido nada, lo que nos cuenta es creíble y válido independientemente de las fechas. Y esto, ya es un punto a favor para el libro.

De la noche a la mañana la raza humana ha perdido la capacidad de procrear. El año 1995 es conocido como el Año Omega y los niños nacidos en esos meses reciben el nombre de omegas. Los conflictos sociales, morales, económicos, etc., que plantea la obra cuando la gente descubre que es el fin de la humanidad, me parecen interesantísimos. Los omegas son una generación mimada que viven sin esperanzas en un mundo que envejece, y lo único que les importa es la comodidad y el placer. Las universidades solo están para los adultos que buscan consuelo en la cultura y proliferan las creencias en las que señalan la esterilidad del hombre como castigo divino por los pecados humanos. El mundo que evidencia la historia, inquieta y desconcierta, pero reflexionar sobre ello es un ejercicio mental que vale la pena.

El protagonista, Theo, es primo de Xan, el Guardián de Inglaterra, un dictador disfrazado de dirigente democrático. Ese parentesco le protege y le facilita el acceso al poder, por eso, los rebeldes se ponen en contacto con él para que interceda por ellos y haga llegar al máximo representante los requisitos y quejas del grupo. La segunda parte no es tan reflexiva como la primera y se centra más en la acción, lo que hace que sea más rápida y ligera. También hay sorpresas que podrían cambiarlo todo y transformar el pesimismo en esperanza.

P. D. James escribe una distopía extraordinaria, con muchos matices para mirar y ser analizados, pero en algunos momentos la narración me resultó lenta y sin chispa. El protagonista es un poco insípido, quizá quisiera reflejar el carácter impasible de los ingleses, no lo sé, pero creo que P. D. James está mejor en sus novelas policíacas. Aun así, es un libro que recomiendo, porque está bien escrito, porque el argumento es bastante original y porque se pueden extraer muy buenas reflexiones.

M. Zeta

Ruiz

Los seres humanos han dejado de ser fértiles inexplicablemente en todo el mundo. La última esperanza para la humanidad ha muerto en las calles de Rio de Janeiro. No hay futuro para la humanidad, y resignado, Theo Faron empieza a escribir su diario a los cincuenta y cuatro años de edad. Escribe con cierta reticencia e ironía sobre la sociedad decadente que queda y el orden que pretende imponer el máximo dirigente de Inglaterra. Pero la historia cambia cuando un grupo de revolucionarios quieren cambiar las cosas para que sus últimos años de vida sean dignos.

Es un libro para pasar un buen rato. La historia es bastante buena, pero se le queda grande a la autora, y la forma de desarrollarla (la historia) es un poco lenta, y como decirlo... sin fuerza. Al final el libro deja buen sabor de boca, pero te queda la impresión de que podría haber sido algo más. La posibilidad de un mundo despoblado, la verdad es que llama la atención y da muchísimo juego, pero no lo desarrolla bien. Para lo poco que me costó (lo compré en una montaña de esas de 2x3 libros) me ha gustado. Una prosa limpia y que no aburre. Salu2.

Ruiz