Hamlet

Opinión:

Leí "Hamlet" en el instituto, en la versión clásica. Y sí, me gustó, lo suficiente como para querer releerlo pero en este nuevo caso, el del clásico adaptado. Y debo decir que cuando tienes cierta edad es verdad que resulta mucho más agradable leer una prosa más sencilla. No robando la esencia de la obra original, y manteniendo muchos aspectos literarios, se ha evitado la dificultad de muchos lectores jóvenes a la hora de tener interés por este gran clásico de la literatura inglesa. Dicho de otra forma: está muy bien adaptado. No ha desaparecido el toque clásico, y ningún joven puede confundirse y entender esta historia como algo contemporáneo y moderno. Ha sido un buen trabajo.

Por otro lado no sólo está la historia trágica de "Hamlet", también contiene una serie de notas y anexos dirigidos al público joven. El pero que le pondría es que cuando un lector nuevo se acerca a Hamlet debe hacerlo con la mínima información, porque esto es teatro y la historia corre muy rápido, y en cambio tanto en sinopsis de tiendas online como en la propia introducción de Lourdes Íñiguez, en apenas unas líneas lo cuentan TODO. Vale que se cuente una parte, ¿pero era necesario contar quién y por qué había asesinado al rey de Dinamarca? Yo ya lo sabía, probablemente muchos lo sepamos, pero el libro es para jóvenes, y deberían llegar a él con menos información. Principalmente por lo dicho antes: es teatro, y el diálogo hace muy ligera la lectura, pero también parece que ya se ha contado todo y no hay sorpresas.

Esta edición de "Hamlet" es, además, una joyita ilustrada, porque algunos dibujos de Óscar T. López para este libro no tienen nada que envidiar a muchas obras de arte que hemos visto en galerías o museos. Maravillosas ilustraciones de aspecto realista, de cuerpos estilizados y esbeltos, colores idóneos y ambientación perfecta.

Para quien aún no se haya acercado a este clásico, que sepa que se encontrará con un joven que se sentirá torturado desde el momento en que pierde a su padre hasta que ve a su espectro y conoce la verdad. Ni siquiera el amor por Ofelia, demasiado manejada por su propio padre y hermano, conseguirán sosegarle, porque hasta Ofelia terminará siendo un dolor más añadido a su vida. Ofelia, pues, acabará formando parte de la tragedia de Hamlet. Y sus amigos, los fieles y los que él considera traidores como Rosencrantz y Guildenstern, permanecerán a su lado o actuarán a sus espaldas, convirtiendo finalmente el futuro de Hamlet en un callejón sin salida.

En fin, yo desde luego lo recomiendo, y creo que los jóvenes, les guste o no leer la obra, se sentirán agradecidos por la accesibilidad del lenguaje.

Anika Lillo