Gracias

Opinión:

"Gracias", de Pablo Katchadjian, es una novela de aventuras que nos lleva a un mundo intrincado y onírico, donde lo familiar se siente ligeramente extraño, pero profundamente atractivo. Sin embargo, la historia no es simplemente una novela de paisajes y viajes; es una meditación muy literaria sobre temas de poder, moralidad, libertad y violencia, todos entrelazados con precisión y un humor sutil y modesto.

La novela comienza con la llegada del narrador como prisionero a una isla, donde es vendido como esclavo. Es un comienzo crudo que prepara el escenario para una narrativa que oscila entre la expectativa y la disrupción. Katchadjian utiliza la previsibilidad del género de aventuras como base,  aunque desviándose ligeramente de su rumbo. Estos desplazamientos, imperceptibles al principio, son donde la novela brilla, desafiando al lector a confrontar la extrañeza que se esconde bajo la superficie de lo familiar.

La prosa exige atención: es cerrada, intrincada y con múltiples capas. Si bien Katchadjian evita el vocabulario ostentoso, su estilo narrativo es muy preciso y exige que los lectores se sumerjan por completo en él para captar su profundidad. Para quienes persisten, la recompensa es una experiencia narrativa matizada y multifacética que combina la simplicidad con la complejidad.

Aunque la esclavitud es el hilo narrativo central, la trama trata de mucho más. El mundo de Katchadjian es un escenario para explorar el choque perpetuo entre el Bien y el Mal, la naturaleza del poder, la maleabilidad de la ética y la fragilidad de las relaciones humanas.

La segunda mitad del libro profundiza en estos temas y  en las dinámicas de poder y los dilemas morales. En este libro, Katchadjian presenta una vívida exploración de cómo el poder corrompe, los compromisos morales que hacemos los seres humanos y la delgada línea que separa lo correcto de lo incorrecto. Esta sección rebosa de tensión y matices filosóficos, invitando a los lectores a lidiar con verdades incómodas.

Lo que hace que sea un placer perderse entre sus páginas es la capacidad del autor para equilibrar el peso literario con el entretenimiento. La novela es corta, de ritmo constante, siendo fácil de leer de una sola tirada. La prosa de Katchadjian crea una atmósfera onírica, casi surrealista, que desorienta pero cautiva. La falta de tiempos y espacios definidos en la narrativa le da una cualidad sobrenatural, que nos arrastra a lo largo de la historia incluso cuando luchamos por encontrarle sentido al viaje. Sin embargo, esta cualidad onírica es a la vez la fortaleza y la debilidad de la novela.

Es verdad que su final abrupto deja cabos sueltos y preguntas sin respuesta. Si bien esto puede frustrar a algunos, otros lo verán como una invitación a reflexionar más sobre los temas y significados de la novela, pero tal vez ese sea el objetivo.

Estamos ante una obra audaz e imaginativa que combina la aventura con la experimentación literaria. Los personajes, llenos de matices, y la prosa evocadora de Katchadjian crean una experiencia de lectura que es tan entretenida como estimulante, ofreciendo momentos de reflexión, incomodidad y descubrimiento.

Novela atrevida, que consolida a Pablo Katchadjian como un escritor que no teme traspasar los límites del género y la forma. Es una historia para quienes disfrutan de la interacción entre el intelecto y la imaginación, la aventura y la introspección. Déjate llevar, amigo lector.

*Novela publicada por Sexto Piso.

Violeta Lila