Gil Pupila Detective Privado. 1960-1963

Título: Gil Pupila Detective Privado. 1960-1963
Título Original: (Gil Jourdan-L´Integrale 2, 2009)
Autor: Tillieux
Editorial:
Dolmen
Colección: Fuera Borda
Copyright:
© 2009, Dupuis, by Tillieux
© Varios por ilustraciones y fotografías de los artículos.
© 2025, Plan B Publicaciones, por la presente edición
Ilustraciones: Color
Edición: 1ª Edición: Febrero 2025
ISBN: 9788410390324
Tapa: Dura
Etiquetas: robos aventuras comic cómic género negro dictadura fantasmas misterio inventos literatura francesa novela gráfica recopilatorio de autor recopilación secretos detectives privados
Nº de páginas: 224
Argumento:
Vuelve el intrépido detective Gil Pupila con su ayudante Libélula y el inspector Corrusco en cuatro nuevas historias largas: en El infierno de Xique-Xique, los protagonistas se enfrentan al alto mando de una dictadura sudamericana con el fin de rescatar al inventor de una peligrosa arma. A continuación, en Festival sobre cuatro ruedas, deberán aclarar una serie de misteriosos robos de furgonetas en París.
Su siguiente aventura, El secreto de la cripta, les conduce a las ruinas de una antigua abadía junto al mar, donde les aguarda un inquietante fantasma. Finalmente, en Las tres manchas, su misión será resolver el robo de unas fotos aéreas que encierran un valioso secreto.
El volumen se complementa con los habituales extras y la historia corta La persecución, protagonizada por Corrusco y Libélula cuando este último era aún un ladrón de joyas.
(sinopsis editorial)
Opinión:
Sabéis, los que habéis leído mis reseñas de BD Bandes dessinées que suelo comentar a qué "escuela" pertenecen los trabajos, diferenciándose prácticamente en los publicados en Tintin y los publicados en Spirou; los unos (los que serían de la escuela de línea clara, escuela de Bruselas, cuyo máximo representante fue Hergé con su creación Tintin), y los de la escuela de Marcinelle, cuyo representante, podríamos asignarselo a André Franquin).
En el caso que nos ocupa, Tillieux considera a Hergé su maestro, y a Franquin su amigo. Y todo esto viene porque al abrir el tomo, la primera idea que me vino es que es de la escuela de Bruselas... pero está publicado en Spirou, el buque insignia de la escuela de Marcinelle. Y tanto es así que en el artículo que complementa esta recopilación se comenta que Charles Dupuis, editor hijo del fundador de la editorial Dupuis pedía a sus dibujantes que imitasen a Franquin, pero Tillieux siguió su línea más cercana a los de Hergé. Sin embargo, una cosa en la que sí que no se metían los editores era en los guiones, que también eran diferentes según la "escuela": la de Spirou (Marcinelle) era, de entrada, más centrada en la fantasía y el humor; la de Tintín, más seria y educativa. Por todo esto, encontramos en la obra de Tillieux una curiosa mezcla, que funciona perfectamente, entre ambas escuelas del cómic franco belga, tanto a nivel gráfico como de guion; es más, como el propio autor reconoce en algún momento, le fue complicado el integrar al protagonista, Gil Pupila (ilustración tipo Bruselas) junto al resto de personajes e incluso decorados (escuela Marcinelle, narices grandes, más redondeados, trazo más agitado). No es que desentone, pero sí que genera alguna escena curiosa, sobre todo, como estoy comentando, si por cualquier razón eres conocedor/seguidor del cómic franco belga. Pero, conocedor de todo esto, y siendo el autor total de la obra, Tillieux consigue (casi a pesar de si mismo, como digo), integrar perfectamente a todos los protagonistas, en escenarios llenos de vida, ciudades y entornos rurales que, a veces, parecen verdaderos retratos de la vida real... y coches, muchos coches, porque el autor era un gran aficionado (más que eso), a los mismos, y los estudiaba, los desmontaba, los reparaba y, en fin, entendía perfectamente su funcionamiento y conocía perfectamente todas sus piezas. Tanto es así, que dentro del constreñido mundo de las revistas de historietas, donde la acción, el movimiento, deben de ser continuos, además de dejar preparada la intriga para las siguientes entregas, se "permite" la licencia de una serie de viñetas mudas en las que vemos un accidente de una camioneta, cómo se va desmontando en la caída por un barranco, cómo va perdiendo piezas en cada golpe. Y con eso, es como si estuviéramos siendo testigos de unas escenas repleta de acción.
En cuanto a los personajes, Gil Pupila es en realidad una versión de otro personaje que fue censurado por diversos motivos, dando lugar a este licenciado en derecho reconvertido a detective privado, en la línea que podemos imaginar tipo de los creados por Dashiell Hammet, Raymond Chandler, etc. Con un dibujo cercano a Tintín, en vez de a Spirou... Le acompaña un ladrón de cajas fuertes, Libélula, convertido en su más fiel ayudante, y su secretaria Cerecita (a la que, al menos en este tomo, veremos muy poco). Otro personaje principal es el Inspector Corrusco, con el que Gil Pupila tiene una relación de colaboración/competición, a la vez que una tensa relación (debida a la asociación de Pupila con Libélula, malhechor que escapó del Inspector debido a la intervención del detective). Este personaje podríamos considerarlo el equivalente a los Dupont/Dupont de Tintín, mientras que Libélula sería una especie de capitán Haddock o, más bien, el Fantasio de Spirou.
En cuanto al arte, ya hemos ido dejando caer que es muy bueno, muy detallado, tanto en los entornos rurales, como en los urbanos, con perfecto dominio de los vehículos. En cuanto a los guiones, con lo que he comentado, Tillieux se sentía en libertad de abordar temas más acordes a una u otra escuela, sin imposiciones de los editores, lo que aprovechó para dotar a los mismos tanto de elementos que (en principio) pudieran parecer un tanto más fantásticos, como otros más "serios", siempre dentro de la temática detectivesca y de investigación, sin miedo, pese a ello, de enviar a los protagonistas a exóticos parajes que, a priori, no parecerían muy adecuados a la temática general, pero que dotan de un plus (en vez de ser un hándicap) a la trama general.
Aunque tal vez no tan conocido como otros referentes de la BD franco belga (Tintín, Spirou, Lucky Luke, Astérix, Gastón el Gafe, etc), he encontrado este volumen altamente disfrutable y, por supuesto, recomendable.
*Publicado por Dolmen Editorial.
J. Javier Arnau
Frases de esta opinión pueden utilizarse libremente en otros medios para promoción del libro, siempre que no se varíe y se mencionen al autor de la misma y al medio anikaentrelibros.com