El valle de las sombras

Opinión:

Ysabel M.

Jerónimo Tristante es un autor que me gusta mucho como escribe. Tiene un estilo que, desde el principio, logra seducir al lector. Le atrapa con una historia llena de intriga que hace que no quiera abandonar la lectura, que continúe adelante para averiguar la verdad y dar respuesta a las cuestiones que se le van planteando a lo largo de la lectura.

Una de sus últimas novelas es esta que vamos a reseñar y que ha publicado la editorial Algaida: "El valle de las sombras", se trata de la segunda parte de su novela "36". Aunque es bueno leer esta antes, más que nada para conocer el pasado de uno de los protagonistas y familiarizarse más con la coyuntura que rodea a la trama, tampoco es imprescindible. Aunque "El valle de las sombras" sea la continuación, puede leerse como una novela independiente.

La primera se desarrolla durante la Guerra Civil, la segunda durante la posguerra. Jerónimo Tristante la ha ambientado durante la construcción del Valle de los Caídos. Esto le da una atmósfera un poco más especial y ayuda a entender el comportamiento de algunos de sus personajes. En esta segunda parte, uno de los protagonistas es Juan Antonio Tornell. Él es policía, pero está preso en Cuelgamuros. Allí va a colaborar con Roberto Alemán, falangista, para resolver un caso: la muerte de Carlitos, uno de los presos. Aparentemente, su muerte es accidental y todos están convencidos de que ha muerto al despeñarse. Todos menos Tornell, que empieza a sospechar. Su comportamiento llamará la atención de Roberto Alemán.

Esta dosis de intriga aporta agilidad a la novela. No se dan muchas pistas sobre las causas de la muerte de Carlitos, eso lleva al lector a seguir la investigación paralelamente a Tornell y Alemán. Por su parte, la base histórica está muy bien desarrollada. "El valle de las sombras" aporta muchos datos históricos que permiten al lector descubrir más cosas sobre este lugar.

Un aspecto que me ha parecido muy importante y que es una de las bases de la calidad de la novela, son los dos personajes principales. Aparentemente, son antagonistas: uno está preso, el otro es su carcelero y les separa su ideología política. Sin embargo, son capaces de olvidar este obstáculo para averiguar la verdad. A medida que la novela avanza, te vas dando cuenta de que tienen más puntos en común que diferencias, en el fondo ambos son víctimas de la Guerra.

Las novelas de Jerónimo Tristante son siempre muy amenas de leer. Él les da mucha agilidad, aunque abunden los textos descriptivos, como sucede con esta. Unos textos que los necesarios, no tienen una apariencia de ser paja o relleno. Todo ello hace que sea una lectura muy recomendada. También hay en ella mucha objetividad, algo que también es fundamental.

Ysabel M.

Aída Albiar

He disfrutado mucho con la lectura de este libro. Jerónimo Tristante nos adentra en la España de postguerra, cuando los vencedores miran por encima del hombro a los vencidos, y en la que la vida de un rojo vale menos que la de un perro.

Durante este período las cárceles españolas están atestadas de presos, violadores, ladrones, estafadores y rojos, muchos rojos. Tantos, que están causando estragos en las arcas de un país empobrecido por la guerra. Además de que gran parte de los recursos económicos se están utilizando para construir El Valle de los Caídos, en la sierra de Cuelgamuros, a las afueras de Madrid.

Para mitigar un poco el gasto, deciden "emplear" mano de obra roja. Al principio, la obra es llevada por tres empresas con operarios libres, pero poco a poco emplearán a los presos políticos para llevar la obra a cabo. Una obra que se suponía de concilio para ambos bandos, pero que después se ha visto históricamente que ha sido un monumento para los caídos del bando nacional. Y la nueva España, con los diarios del régimen es ajena a todo esto. Nadie sabe (sospechan, pero nada más), que están utilizando a los presos para reconstruir a un país asolado por la guerra…

Con una prosa rica, una trama bien elaborada y unos personajes que se perfilan en tres dimensiones, Jerónimo Tristante nos mezcla historia con ficción, y nos narra la experiencia de un policía nacional, que termina como oficial en el bando republicano, y un oficial del ejército nacional, dentro del escenario de la obra faraónica del caudillo.

Una obra muy amena en su lectura, escrita con sentimiento y que gustará tanto a los amantes de este período de historia, como de los más reticentes.

Aída Albiar