el rapto del tiempo

Opinión:

El tiempo: aún siendo tan etéreo, José Luis Zapatero y Diana Gavilán han conseguido atraparlo y encerrarlo dentro de un pequeño volumen de casi 200 páginas. Un delicioso libro que se lee de un tirón acompañado con un par de cafés. 
 
"El rapto del tiempo"es, cuanto menos para el público en general, un libro curioso por su temática. Nadie antes nos había dicho que las empresas se preocupaban por gestionar esos tiempos de espera que gastamos con paciencia antes de recibir sus servicios.
 
Contado con sentido del humor, y un lenguaje cercano y correcto, el libro ilustra la teoría que expone con abundantes ejemplos prácticos que amenizan la exposición. Además, los autores han creado unos pequeños relatos ad hoc que harán las delicias de los lectores y donde se puede apreciar su estilo directo y, hasta cierto punto lúdico, con el que José Luis y Diana han querido imbuir su obra y nos invitan a gestionar todos esos minutos, a veces horas, en que nos vemos obligados a esperar para conseguir algo.
 
Los lectores agradecerán esos pequeños relatos que, como micro- cuentos, tornan muy visuales las explicaciones teóricas y en los cuales puede observarse la mano de un narrador seguro y fiable.
 
Gracias a ellos, comprenderán porqué algunas esperas pueden parecen más largas de lo que son en realidad y porqué las empresas se preocupan de hacernos el tiempo más agradable o de entretenernos mientras esperamos.
 
Aunque hablamos de un libro de fácil lectura, no lo es de escritura sencilla. Si se lo parece al lector habrá sido por el buen hacer de los autores que han seccionado un tema tan complejo como el de la “espera” en capítulos asequibles al tiempo que lo ilustraban con ejemplos muy visuales.
 
Y, lo que aprenderemos es que, lo importante por parte de las empresas no es reducir o eliminar nuestro tiempo de espera, sino de hacerlo más cómodo y confortable. Los porqués los encontrará el lector dentro del libro.
 
Está escrito con un lenguaje sencillo, comprensible y, además, sosegado, para leer sin prisas. Los temas están bien enfocados y goza de un punto de humor que torna amena a la narración.
 
El libro está dirigido para todos los lectores, porque ¿quién no ha tenido que esperar alguna vez? Y, parafraseando a sus autores, está dedicado “a quienes protagonizan las esperas y las alimentan gratuitamente con su tiempo, pero también a quienes se preocupan por gestionarlas de manera eficiente.”

Gemma Nieto