El ingrediente secreto de Emoni Santiago

Opinión:

"El ingrediente secreto de Emoni Santiago" es la segunda novela de Elizabeth Acevedo. "The Poet X" es su primera novela, con la que ganó el Premio Nacional del Libro en la categoría de literatura juvenil en el 2018.

Aunque "El ingrediente secreto de Emoni Santiago" también está catalogada como juvenil, a mi parecer es una novela que va a disfrutar también un público adulto.

Lo primero, me gustaría destacar la edición que Puck ha realizado. La portada tan colorida me ha fascinado. Por otro lado, el interior es también muy llamativo, ya que, por ejemplo, al inicio de cada capítulo tenemos una pequeña ilustración en blanco y negro de un ingrediente de cocina. La historia está dividida en tres partes, y cada separación también viene adornada con las ilustraciones y además con una receta de Emoni Santiago. Este detalle me ha parecido curioso, ya que además las recetas son fáciles de realizar y es una manera diferente de que el lector se adentre en la historia: probando a realizar las recetas.

Me ha gustado mucho la manera de escribir de Elizabeth Acevedo. Es fluida, amena y con un toque de sentimentalismo y un pensamiento profundo que en ocasiones hace que el lector tenga que hacer una pequeña pausa.

Elizabeth Acevedo presenta una historia que quizá pueda chocar para un público juvenil: la de una chica de tan sólo 17 años, sin madre, con un padre ausente, criada por su abuela, que estudia y trabaja para ayudar en casa, y además es madre de una pequeña, a la que cariñosamente llama Babygirl.

Emoni Santiago, nuestra protagonista, no ha llevado ni lleva una vida fácil, la cual iremos descubriendo poco a poco, pero aun así ella no se rinde y lucha por sus sueños. Ese es el mensaje que más me ha gustado, y que veo muy importante para los jóvenes: no rendirse, no desanimarse, luchar por lo que se quiere a pesar de las dificultades. Y de paso, como recordatorio para los adultos no está mal, que en ocasiones nos relajamos o se escoge el camino fácil y dejamos de lado lo que importa.

Aparte de este mensaje, también encontramos numerosas referencias sobre la importancia de la familia y el apoyo que se recibe de esta. El amor, nunca es tarde para disfrutar de él, y que en este caso la edad no importa. La amistad sincera y sin condiciones. Y el paso entre la juventud y la madurez, ser responsable e independiente.

Elizabeth Acevedo no se ha centrado sólo en la historia y los mensajes que quiere transmitir, sino que los personajes que componen "El ingrediente secreto de Emoni Santiago" son muy peculiares y especiales, cada uno a su manera.

No hay duda de que tanto Emoni Santiago como su abuela, son dos mujeres fuertes y valientes. También encontramos estas cualidades reflejadas en otros personajes, como en Ángela, la amiga de Emoni Santiago o en las diferentes chefs que Emoni Santiago va conociendo.

Por otro lado, la parte masculina de la historia también dejará huella en el lector. Julio, el padre de Emoni Santiago, un tanto ausente con su familia pero volcado en otras acciones. El profesor de Arte Culinario, Ayden, estricto, pero a la par volcado en ayudar cuando hace falta. Y por último, Malachi, compañero de Emoni Santiago y un "no amigo" importante, que aporta un pequeño toque de humor y cambio en la vida de nuestra protagonista.

Toda la historia está aderezada con un toque de magia gracias al don de Emoni Santiago con la cocina. Ese toque que ella siempre añade a sus platos, el lector lo podrá saborear a lo largo de la historia.

Por poner un pequeño "pero", me ha faltado algo en el final. No soy muy fanática de los "epílogos", pero creo que aquí hubiese hecho falta. Ojo, no es que la historia no quede cerrada o con mal final, pero después de ese final un tanto entrañable, y del cariño que se van cogiendo a los personajes, me hubiera gustado un "x años después", y que esta vez no fuese a cargo de la imaginación del lector.

"El ingrediente secreto de Emoni Santiago" es una historia llamativa, que mantiene en todo momento un toque positivo y alegre a pesar de los problemas.

Vane Gómez