El guardés del tabaco

Opinión:

Jairo Junciel es un escritor de Salamanca y con esta novela ganó el III Premio Internacional de Novela Albert Jovell. "El guardés del tabaco" ha sido publicada por Almuzara y nos lleva a la España del XVIII.

Es una novela histórica llena de acción de capa y espada. La verdad es que no te aburres con ella, tiene momentos muy buenos. Cuando he empezado a leerla, y sobre todo a medida que vamos conociendo a su protagonista Aníbal Rosanegra, no he podido evitar hacer un paralelismo entre Aníbal y Lázaro de Tormes. No sólo porque ambos son de Salamanca, nacen a orillas del Tormes, empiezan a ganarse la vida sirviendo a un ciego, sino porque Aníbal tiene mucho de pícaro. Cualidad que va a ayudarle mucho a salir airoso de muchos de los problemas en los que se mete.

Junto a él está Cucha, antiguo soldado de los Tercios de Flandes que va a ser su apoyo. Juntos forman un tándem perfecto. Esa cualidad de pícaro que he dicho que tiene Aníbal también se da en Cucha. Tanto uno como el otro son personajes sin los cuales la novela perdería parte de su esencia. Una de las cosas que más me han gustado de Aníbal Rosanegra es que es un hombre ilustrado, hace muchas referencias a clásicos como Quevedo o Calderón de la Barca, lo hace porque los ha leído. Aníbal es un personaje que te sorprende a cada página.

La novela es muy completa. Tiene su parte histórica, con un tema que conocía poco como es la figura de los guardeses del tabaco, otra de intrigas palaciegas con conspiraciones incluidas, batallas, un personaje malo interpretado por Gargantúa que tratará de eliminar a nuestro héroe, crítica social... Elementos perfectamente entrelazados y que son la base para que "El guardés del tabaco" no pueda aburrir sino todo lo contrario: es una lectura muy entretenida, te la lees sin darte cuenta.

Jairo Junciel es un buen escritor. Se nota que toma influencias de clásicos como Dumas o del Alatriste de Pérez Reverte (aunque yo creo que Aníbal Rosanegra tiene más personalidad que Alatriste y es más auténtico) pero él las adapta a su estilo. Estas influencias no son negativas, gracias a ello la novela tiene una atmósfera muy clásica, muy "siglo XVII" o picaresca. Me gusta, creo que le da un toque original.

"El guardés del tabaco" es, por lo tanto, una novela más que recomendada, sobre todo si te gusta la novela histórica llena de aventuras, capa y espada, y acción.

Ysabel M.