El brazo marchito y otros relatos

Opinión:

Siete relatos, siete historias diferentes con un fondo en común (la vida rural inglesa del siglo XIX y la forma de escribir de Thomas Hardy) pero con temas, estilos, tratamientos y mensajes diferentes. Aunque, ahora que escribo esto y que iba a incluir el objetivo final de cada cuento entre esas diferencias, creo que he de corregir mi primera impresión: el objetivo de cada cuento es el mismo que el del conjunto de la obra y no es otro que, por supuesto, hacer disfrutar al lector pero, también, inquietarle, removerle, hacerle pensar.

Y es que la compilación que ahora reseño reúne siete cuentos escritos en épocas diferentes (en el muy clarificador prólogo de Manuel Rodríguez Rivero se explica en qué momento se escribió cada uno y en la página que da inicio a cada cuento, en la que aparece el título en castellano, también se incluye el título en inglés y el libro original en el que apareció cada relato en concreto) pero que tienen en común tanto un regusto amargo o pesimista sobre el hombre y la sociedad en la que vive como el afán del autor británico de resaltar lo extraordinario que se cuela entre la vida corriente, lo singular dentro del costumbrismo de una época.

Como bien explica Rodríguez Rivero en el prólogo, los cuentos de Hardy son iguales pero diferentes a su producción novelística. Son iguales en la filosofía literaria del autor y en su estilo (o, podríamos decir también, su capacidad para adoptar estilos diferentes)  y en reflejar, de un modo y otro, pasajes vividos por el escritor que le dejaron huella, pero se diferencian en que los cuentos (como su propia naturaleza exige) son mucho más directos, más concretos. En ellos no encontramos digresiones del autor reflexionando sobre la naturaleza del hombre, su bondad o su maldad. Aquí los hechos hablan por sí solos. ¡Y de qué manera lo hacen!

Si analizamos cuento por cuento, vemos que la antología se abre con "Los tres desconocidos", un relato en el que notamos, precisamente, cómo lo extraordinario puede irrumpir en cualquier momento en nuestras vidas (en este caso, en medio de una fiesta) y cómo el destino teje sus hilos para que no siempre la justicia haga su trabajo (quizá porque esa justicia estaba equivocada).

"El brazo marchito", el relato que da título a la antología, es uno de los que más me han gustado y nos habla de la dimensión sobrenatural de la existencia humana. Una historia de celos, rencores enquistados, injusticia social y venganza (casi habría que decir involuntaria) que, como muchos de los cuentos de Hardy, dejan un regusto muy amargo en la boca.

"El predicador desconcertado" nos pone frente a los ojos un modelo de mujer poco frecuente en la literatura de la época (y quizá también en la propia época) pero que sí conecta con un determinado modo de ser mujer que Hardy mostró en más obras. Decidida, arriesgada y valiente, la protagonista lleva las riendas de su propia vida y no permite que el romance o una moral impuesta condicionen sus decisiones.

"La tumba de la encrucijada" nos habla de las relaciones entre padres e hijos, de expectativas no cumplidas, de decepción y de venganza.

Si en "El predicador desconcertado" encontramos a una mujer que sabe lo que quiere, en "El violinista ambulante" descubrimos a otra cegada por la pasión (algo que también ocurre en el último de los relatos, "Bárbara de la Casa de Grebe"). Una historia que nos habla de perdón y aceptación pero también de pasión y de los criterios en los que basamos las elecciones de nuestras vidas, escrita con una punzante ironía.

"Una mujer soñadora" vuelve a mostrarnos un modelo de mujer diferente, amante de la literatura y las letras, que no se conforma con la vida de esposa y cuidadora que la época le ha asignado.

Finalmente, en "Bárbara de la Casa de Grebe" encontramos el lado más cruel y hasta podríamos decir 'gore' de Hardy, con un cuento muy duro que nos permite reflexionar sobre los impulsos, los matrimonios desiguales, la capacidad para aceptar las desdichas del futuro y la importancia del dinero o la belleza a la hora de elegir pareja.

Como puede verse, "El brazo marchito y otros relatos" nos regala una completa colección de relatos interesantes y escritos con un pulso extraordinario que nos muestran el potencial literario de uno de los mejores autores realistas ingleses.

Lidia Casado