El bosque de las brujas

Título: El bosque de las brujas
Título Original: (Witch’s Forest, 2025)
Autores: Kew, Royal Botanic Gardens, Sandra Lawrence
Editorial:
Blume
Colección: Blume naturaleza
Copyright:
© 2025 Naturart, S.A. Editado por BLUME
© 2023 Welbeck Non-fiction Limited, Londres
© 2023 The Royal Botanic Gardens, logotipo e imágenes de Kew, The Board of Trustees of the Royal Botanic Gardens, Kew.
Traducción: Remedios Diéguez DiéguezIlustraciones: Color
Edición: 1ª Edición: 2025
ISBN: 9788410268272
Tapa: Dura
Etiquetas: naturaleza conocimiento folklore guía leyendas libros ilustrados supersticiones plantas medicinales sabiduría fe y creencias bosques tradiciones árboles no ficción
Nº de páginas: 207
Argumento:
"El Bosque de las brujas" presenta más de cincuenta de los árboles más majestuosos y místicos del mundo. Desde las escobas de abedul y el olivo sagrado hasta las puertas de aliso y el Árbol de la Vida. Este cautivador estudio del bosque profundiza en los usos míticos y la historia mágica de las especies más nobles de la naturaleza.
Las leyendas, las supersticiones y los secretos de estos magníficos gigantes se acompañan de sorprendentes imágenes y hermosas ilustraciones procedentes de los archivos de los Royal Botanic Gardens, Kew.
Opinión:
Cuando evocamos la palabra "bosque" todos nos imaginamos una basta superficie de árboles separados entre sí, pero al mismo tiempo formando una tupida maleza, y con diferente significado según quién la evoque. Para muchos será un paraje laberíntico donde puede ser complicado encontrar la salida; para otros puede ser el escondite perfecto de cualquier fechoría; algunos los creerán dueños de encantamientos y morada de duendes, brujas y fantasmas de los que cuidarse el resto de mortales. Pero, lo que sin duda es innegable, es que entre sus profundidades nos encontramos con verdaderos tesoros, especies algunas muy importantes en la medicina, y la mayoría grandes fuentes de sabiduría, algo que viene de miles de años atrás, pues ya en la Antigua Grecia se veneraban y consagraban los bosques en nombre de dioses.
Los bosques albergan todo un mundo por descubrir, y sus pobladores no se libran de ser objeto de leyendas, rituales y supersticiones populares en la mayoría de las culturas y, como nunca se sabe…, aquí va una breve mención de alguna de ellas por si acaso…
Las hay escabrosas a más no poder, como la higuera un árbol sagrado en la cultura India con gran significado en la fe budista; o el ciprés, venerado desde la antigüedad y considerado hoy en día como la planta funeraria por excelencia, que se puede encontrar en los cementerios, tal alto espigándose hacia el cielo, simbolizando la victoria de la vida sobre la muerte; o el olmo, que dicen tener la mejor madera para fabricar ataúdes; o el enebro que, cuidado si uno está enfermo y sueña con él, porque presagia que no se recuperará y no tardará en estar rodeado de cipreses…; o el bambú, que en zonas de India se dice atrae a los espíritus malignos o invita a la muerte; o el fresno, muy importante en las tradiciones europeas como que talarlo es señal de mala suerte, o poner brotes de fresno en las cunas de los bebés como símbolo de protección muy arraigada en Gran Bretaña.
Bajando de intensidad, los hay relacionados con el folclore religioso como el cerezo, la flor nacional de los japoneses y con múltiples leyendas en distintas culturas, incluso en la Europa cristiana sobre San José y la Virgen María que reconozco nunca había escuchado y espero no volver a hacerlo, pues hiere cualquier sensibilidad…; o el sauco, el árbol desde el que Judas Iscariote se ahorcó, o parece ser que la cruz de Cristo era de sauco, tras lo cual el árbol se avergonzó tanto que se redujo al tamaño de un arbusto encorvado por la vergüenza; o el olivo, tan propio de la Semana Santa que en breve comenzamos, símbolo del perdón de Dios; o esos árboles huecos que encierran cierto misterio y encantamiento, llegando a tener gran valor místico, pues muchas imágenes religiosas se dice que han aparecido en cavidades.
Seguimos bajando la intensidad y llegamos a los más lúdicos, como el abeto, el clásico árbol de Navidad extendido mundialmente, pero cuyo primer testimonio data del año 1605 cuando ya se llevaban a los salones y se decoraban y, ¿saben cuál era su finalidad? Pues la de aportar alegría al mundo en la época del año de más oscuridad en casi todas las partes; o el castaño, que inevitablemente nos transporta al olor de las castañas asadas tan propias del invierno. O el romántico acebo.
Sin poder olvidar los de gran tradición medicinal o que nos proporcionan de comida como el arce y el azúcar extraído de su savia que es muy típico en Canadá tanto como que su hoja forma parte de su bandera nacional; el eucalipto, un árbol medicinal desde tiempos inmemoriales; o el mango, cuyo fruto está ahora muy de moda y representa la "lujuria desenfrenada" porque su fragancia despertaba la pasión entre los humanos y los dioses.
Así, encontraremos muchos más, la selva tropical, el cocotero que nos transporta a islas paradisiacas, el álamo, el endrino, el musgo, el nogal, el haya, el sauce asociado a la tristeza, etc. Esto es solo una pequeña pincelada de la sabiduría popular en torno a los árboles, con muchos de los cuales estamos familiarizados, pero poco sabemos de los grandes secretos que esconden. Al final, la autora proporciona un fascinante mundo de estos grandes pobladores que cada vez explotamos más, y cuidamos menos.
*Publicado por Blume.
Belén Flores
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Comentario de los lectores:
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