el arte de ver. reeducación de la vista

Opinión:

No se trata de una novela sino de un ensayo de carácter divulgativo, con algo de libro de auto-ayuda también, en el que Huxley, con un lenguaje sencillo y bastante asequible nos va ilustrando acerca de las técnicas básicas del Arte de Ver del doctor Bates. Por lo tanto, el autor de “Un mundo feliz” o “Música en la noche” no intenta hacer un texto literario, sino algo mucho menos ambicioso.

Resulta un libro interesante por lo que tiene de precursor de un género literario (el libro de auto-ayuda) y también por ser uno de los primeros textos en los que se plantea una medicina alternativa, además de un modo bastante convincente.

En ese sentido, El arte de ver resulta un ensayo bastante bien estructurado, que plantea una serie de cuestiones bastante interesantes: como en realidad, cuando alguien acudía a un oculista lo único que estos podían hacer era recetar unas gafas, ya que los problemas de visión teóricamente no tenían ninguna curación. Pero según Huxley, eso sucedía porque tradicionalmente los oftalmólogos se olvidaban que en el proceso de la visión no sólo intervienen los ojos sino también la mente. Es decir, no enseñaban técnicas para poder mejorar la vista, conseguir una relajación muscular, tratar de favorecer ambientes bien iluminados a la hora de leer…

En la actualidad, la gente se gasta grandes cantidades en operaciones para curar la miopía; el método del doctor Bates resulta mucho más barato, más asequible y más cotidiano. Habrá que investigar si en realidad resultó a la larga tan eficaz como defendía Huxley o no. Lo cierto es que Huxley mejoró su visión sobre todo en un ojo, pero no tanto en el otro. En todo caso, no creo que a ningún oftalmólogo le interesara demasiado que estas técnicas fueran efectivas, habida cuenta lo rentables que resultan estas operaciones o recetar lentillas.

El libro me ha parecido bastante curioso, pero poco más. No me parece la mejor manera para empezar a conocer a Huxley o para sacar conclusiones acerca de su estilo literario o su modo de narrar, pero, ya digo, como ensayo resulta de lo más interesante.

Otro día, hablaremos de las experiencias de Huxley con la mescalina y el LSD.