el alcalde del crimen

Opinión:

El curriculum vitae de Francisco Balbuena atesora el IV Premio de Novela Ciudad de Badajoz, el IX Premio de Novela Francisco García Pavón de Tomelloso, el XI Premio Río Manzanares de Novela y el XIV Premio de Novela Negra de Getafe, amén de haber sido finalista del Planeta, el Azorín, el Fernando Lara y el Primavera, lo que dice mucho de su calidad narrativa.
 
Y una gran muestra de esa calidad la podemos encontrar en "El alcalde del crimen", una obra a medio camino entre la historia y la novela negra donde los personajes están perfectamente caracterizados y la trama es redonda. Cuenta con unos inicios interesantes que enganchan al lector desde los primeros párrafos y el autor cuida mucho el lenguaje y los diálogos para hacer la obra más creíble.
 
Merece la pena destacar la amplia documentación que debe de haber estudiado el autor porque en la obra podremos conocer, de su mano, los usos y costumbres del siglo XVIII, la moda, los diferentes tipos de carruaje, la gastronomía… Un trabajo bien elaborado que ha sabido insertar en la obra en los momentos y en las dosis justas para crear la atmósfera adecuada. Lo consigue porque inserta la documentación necesaria tanto en forma de diálogos, como en sus acotaciones o en pequeños párrafos narrativos, de tal forma que esta amplia variedad hace que el lector no lo perciba como “añadidos” desgajados de la historia, sino que forman parte de ella.
 
El tono general de la narración es serio y cuidado, manejando un amplio y preciso vocabulario. De vez en cuando el autor echa mano de un humor inteligente (pág. 42 y 43) que sorprende al lector y que resulta agradable.
 
El uso de frases demasiado largas y la cantidad de adjetivos que maneja Francisco Balbuena confieren cierto aire añejo a la obra, muy a tono con el periodo histórico (siglo XVIII) en el que se desarrollan los hechos; aunque, por otro lado, esta forma de narrar consigue ralentizar la acción.
 
Aunque ofrecer hasta los datos más pequeños, como el recorrido de los diferentes personajes por la ciudad de Sevilla, calle a calle, otorga una gran credibilidad a la parte histórica de la trama, también es cierto que el lector está más pendiente del desarrollo de la historia que de las calles andaluzas y haber hecho menos referencia a ellas no habría invalidado en absoluto la calidad narrativa ni su credibilidad.
 
"El alcalde del crimen" no es una novela sencilla, más bien es compleja. El autor recrea con realismo las vidas de los personajes (y son muchos) de un modo certero, así como las circunstancias históricas del resto de España que se hacen sentir en Sevilla… y, en general, ofrece gran profusión de datos que invitan a una lectura reposada. De alguna forma ha sabido reducir el ritmo trepidante de una novela negra con descripciones y narraciones que confieren ambiente. Sabe hilar una buena trama de misterios intercalándola con subtramas para ofrecer pistas falsas que a su vez enriquecen la historia; y el lector, lejos de sentirse defraudado, cuando quiere percatarse, se encuentra enredado en ese ovillo argumental.
 
A lo largo del libro nos encontraremos con las ideas de los principales ilustrados del siglo VXIII, su filosofía vital de racionalismo, deduccionismo… como corresponde al Siglo de las Luces.
 
Resulta agradable leer un buen libro, con una excelente ambientación, personajes bien construidos y con una prosa cuidada, limpia a veces, recargada en otras ocasiones… una forma de trabajar que da fe del amplio registro literario del autor. Además, la editorial Martínez Roca ha presentado la obra con tapa dura y sobrecubierta y ha cuidado los interiores. Realmente, Francisco Balbuena ha escrito una obra que merece la pena ser leída.

Gemma Nieto