Anika entre libros

Departamento Q. Los chicos que cayeron en la trampa

Ficha realizada por: Fernando Martínez Gimeno
Departamento Q. Los chicos que cayeron en la trampa

Título: Departamento Q. Los chicos que cayeron en la trampa
Título Original: (Fasandraeberne, 2008)
Autor: Jussi Adler-Olsen
Editorial: Maeva


Copyright:

© 2008, JP/Politikens Forlagshus Kobenhavn
© 2011, Maeva Ediciones

Traducción: Nicolás de Miguel
Edición: 1ª Edición: Septiembre 2011
ISBN: 9788415120308
Tapa: Blanda
Etiquetas: género negro policiaca literatura danesa daneses sagas trilogías ciclo thriller
Nº de páginas: 512

Argumento:

A finales de los años noventa, la policía encuentra, en una casa de veraneo en el norte de Dinamarca, a dos hermanos adolescentes brutalmente asesinados. Han sido golpeados, torturados y violados sin compasión. La investigación policial apunta a que los culpables pueden hallarse entre un grupo de jóvenes de buena familia, hijos de padres exitosos, ricos, cultos. Sin embargo, el caso se cierra muy pronto por falta de pruebas concluyentes hasta que, pocos años más tarde, uno de los sospechosos se entrega sin razón aparente y confi esa el crimen. Supuestamente, el misterio se ha resuelto. Pero entonces ¿por qué los archivos del caso aparecen veinte años después en el despacho del inspector Carl Mørck, jefe del Departamento Q.? Al principio Mørck piensa que el caso está ahí por error, pero pronto se da cuenta de que en la investigación original se cometieron muchas irregularidades…

(argumento editorial)

 

Opinión:


A finales del año pasado, tuve la oportunidad de iniciarme en las aventuras del Departamento Q, con la primera de sus novelas, La mujer que arañaba las paredes. Y llegado el mes de septiembre de este 2011, me llegó la noticia de la publicación de este segundo libro. Leyendo la contraportada del mismo, me alegra ver que al menos hay otras dos novelas y que es de suponer que la editorial seguirá publicándolas.

¿Qué tiene este Departamento Q que me haya llamado tanto la atención? Dejo aparte los títulos que se les han puesto a los casos, pero bien es cierto que reflejan muy claramente lo que luego se va desarrollando en la trama.

Hay mucho más que un título rimbombante. Para empezar, Carl Mørck no es un policía al uso. En esta ocasión ya no tiene tan presente los problemas que le plantea su exmujer, sino que interioriza más en sus propios pensamientos, ya que sigue sintiéndose culpable del tiroteo que tuvo junto a otros dos compañeros y que acabó bastante mal, con uno de ellos muerto, y con Hardy, el otro compañero, incapaz de moverse del cuello para abajo. Sus visitas a Hardy le darán algunas claves para resolver el misterio que se esconde tras ese incidente, y como la mente de Hardy sigue en funcionamiento, también le irá contando sus investigaciones para ver si le puede dar alguna luz. Pero ojo, no es la típica relación que hace que sea este amigo quien resuelva el caso. Son una forma de hacerle olvidar a Hardy sus intentos de suicidio.

También se suma a la historia una cierta crítica social a diferentes estamentos. En la primera novela se hablaba de los políticos, y en esta ocasión se "dispara" contra las clases más privilegiadas de la sociedad danesa, y de cómo cualquier conciencia se puede callar con dinero. Algo que se va descubriendo conforme el subinspector interroga a diferentes testigos de la primera época del caso. Y es que recordaré, que el departamento Q es un departamento policial que se monta para investigar casos abiertos que no se han logrado cerrar a lo largo de varios años. Y en el caso que nos ocupa en esta segunda novela, aunque hay un encarcelado por el asesinato de dos hermanos, alguien no termina de estar convencido de su culpabilidad, y es ahí donde entra el subinspector y sus ayudantes.

Ayudantes sí, que si en el primer caso sólo contaba con un curioso árabe de nombre Assad, que le servía a Carl de secretario / ayudante / chico de los recados, se les une una secretaria que el veterano policía no quiere desde el principio, Rose, y con la que tendrá que ir moldeando sus malos modales. Sus momentos de diálogo son de lo más ácido y divertido de la novela. Y Assad también nos dará momentos divertidos, y con los que se intenta relajar el tenso caso, cuando dé su particular visión de algunas frases hechas.

Si hay algo que me ha parecido muy acertado, es que no se abusa del panorama familiar de Carl, ni del trato con sus compañeros, se centra sobre todo en la investigación y el recuerdo de cómo fue la vida de los sospechosos años ha. Porque la trama se cuenta desde dos épocas distintas. En la actualidad, veremos al policía intentado juntar las piezas del puzzle, a los sospechosos en su lugar en la sociedad actual y en unos 20 años antes, cuando estaban internados.

Certifico con esta segunda aventura, que lo que se intuía en esa primera, en cuanto a atracción de los casos, de los personajes y su interacción, así como su perfil, sigue estando presente y se siento uno, como lector, imbuido dentro del Departamento, así que por esa parte, uno disfruta con la investigación y por otro, y aún sabiendo quienes son los culpables, se disfruta viendo como caen en la trampa.

Fernando Martínez Gimeno

 

 

Frases de esta opinión pueden utilizarse libremente en otros medios para promoción del libro, siempre que no se varíe y se mencionen al autor de la misma y al medio anikaentrelibros.com

¿Te ha gustado? Compártelo:

Comentario de los lectores:

Publicidad
Anika entre libros
Actividad subvencionada por el Ministerio de Cultura
Ministerio de cultura

Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Más información X Cerrar