Cuentos completos

Opinión:

En esta edición, por fin, podemos encontrar todos los relatos escritos por Mark Twain, por lo que los lectores ya podrán de dejar de comprar múltiples selecciones del autor para tratar de leer toda su narrativa breve. En muchas ocasiones, por no decir en todas, muchos de los relatos se repiten, por ser considerados de mayor envergadura, y son pocos los que difieren de una edición a otra.

Así, no queda más que agradecer a la editorial el esfuerzo de reunir en un solo volumen estos 60 relatos con los que muchos lectores disfrutarán de la prosa humorística, y en ocasiones satírica de Mark Twain.

Muchos de estos relatos fluctúan entre la realidad y la ficción, siendo bastante difícil discernir entre lo que es verídico y lo que es inventado, ya que le encantaba jugar con hechos reales y tratar de dotarlos de un punto de ficción que hiciera dudar a la gente, algo que hace con mucha soltura. En general, predomina el humor; sin embargo, existen algunos en los que trató de acercarse a algo parecido al drama, como un intento de mostrarse un escritor serio. Casualmente estos relatos son los más crípticos y los menos notables de su creación.

El estilo de Twain es directo, sin florituras ni adornos. Sabía lo que quería contar y lo hacía sin tapujos, de forma natural de ahí la fuerza de su narrativa y de su expresión literaria que se apoyaba completamente en el lenguaje sencillo y claro que necesitaba para llegar a la gente. Porque Mark Twain sabía lo que querían sus lectores y era por ellos para los que escribía.

Muchos de estos relatos son de sobra conocidos para los lectores habituales del autor como "El billete de un millón de libras" que trata de la riqueza sin más, haciendo hincapié en el dicho de que dinero llama a dinero, o "El diario de Adán y Eva" una especie de retrato sobre los roles masculino y femenino utilizando como fondo argumental la biblia y con una importante carga humorística.

Otro tema muy presente en su relatos es la vida periodística, algo de lo que realmente sabe; un tema que trata con broma y sin pelos en la lengua.

Historias entretenidas, amenas y divertidas que animarán al lector a descubrir a un Mark Twain diferente al que nos han tratado de vender como escritor de novelas infantiles y juveniles. Historias que nos sacarán más de una sonrisa, pero que al mismo tiempo nos harán reflexionar sobre la forma de actuar y de pensar del ser humano, porque el autor sabía que a través de la sátira y la ironía se podía llegar a más gente que con la reflexión pura y dura.

Mila L. Castelo