Confieso que he vivido

Opinión:

Pablo Neruda fue una de las eminencias culturales del siglo pasado, además de una de las figuras más importantes en Sudamérica, por su implicación en la política. Ya de por sí, una biografía de alguien de ese calibre y de esa enjundia no puede pasar desapercibida, más allá de los gustos poéticos del lector. Si bien él es mundialmente recordado por su brillante poesía, la cual le llevó al Premio Nobel en 1971, este libro aporta la perspectiva particular de alguien que, tal como indica el título, "ha vivido". En efecto, su trabajo como cónsul o embajador en países como Tailandia, Birmania o París le sirvió al poeta chileno para vivir y atestiguar un mundo convulso y agitado, sobre todo sacudido por la eclosión de las dos Grandes Guerras Mundiales. El libro aquí en cuestión constituye una gran revelación de este mundo con la mirada de un hombre sensible y sensibilizado, siempre movido por la igualdad y los derechos humanos. 

"Confieso que he vivido" muestra los momentos más íntimos y personales del autor, mezclados con su visión del mundo y de la poesía, a la que él le debe todo o prácticamente todo. Allende la fama, o los premios que le reportó, la poesía lo ayudó a expresar sus emociones, a expulsar sus pensamientos, a sentirse a sí mismo o a conocer a muchos otros poetas (con especial dedicación a poetas españoles). Él mismo reconoce que su poesía es su alter ego. No es de extrañar, pues, que su bibliografía esté atestada de personajes reales o de hechos históricos. Sin embargo, el lector no descubrirá aquí cómo se elabora un poema. Pablo Neruda apenas le dedica espacio a la creación en sí, sino a toda aquella circunstancia que lo impulsa a escribir. Es por ello que el lector que desee leer este libro busque más al Neruda pensador y vividor que al Neruda creador, pues se frustrarán al hallar pocos renglones al respecto.

Es un libro un tanto caótico, a pesar de que su narración sea cronológicamente lineal. Sus divagaciones lo desvían del camino y se pierde en una maraña de ideas y sucesos que descolocan a cualquiera. De hecho, es bastante simbólico que la biografía fuese inacabada, puesto que la muerte sorprendió al poeta poco después del golpe de estado en Chile de 1973. Un año después de este trágico suceso, su difunta esposa y Miguel Otero Silva se encargaron de la recopilación del material.

El libro está ampliado, con la inclusión de textos inéditos (como uno sobre Federico García Lorca), de fotografías del poeta y de reproducciones de algunos de sus manuscritos. Sin duda alguna, motivo suficiente para volver a sumergirse al mundo personal del poeta chileno.

Un clásico reeditado. Un Poeta del siglo XX.

Cristià Serrano