Cómo ser humano

Opinión:

En "Cómo ser humano" Camilla Pang aborda distintas cuestiones relacionadas con la naturaleza humana de una forma diferente, ya que su perspectiva como persona con neurodiversidad es muy diferente de la habitual. Sus problemas para conectar con lo humano eran varios: el hecho de que no entendía las situaciones sociales, que interpretaba todo literalmente, que reaccionaba exageradamente (para el criterio normativo) a según qué estímulos y un sinfín de cosas más la aislaban e impedían que encajara.

Para abordar todas esas cuestiones, se fijó en el lenguaje que mejor dominaba, la ciencia, y encontró paralelismos entre esta y nuestras relaciones cotidianas, decisiones, conflictos, interacciones... De esta forma, compara cosas que en apariencia no tienen nada en común pero que, una vez relacionadas, permiten sacar un aprendizaje sobre la vida: compara la toma de decisiones y el aprendizaje automático; las distintas capacidades y la individualidad con las proteínas o la dinámica molecular; el desorden con la termodinámica; el miedo con la descomposición de la luz; la armonía en las relaciones con la teoría de ondas, la teoría de juegos o los enlaces químicos;  la fijación de objetivos con la física cuántica y las teorías de redes; la empatía con problemas de probabilidad...

Al final, no deja de ser un libro de autoayuda y autoconocimiento que nos permite ver diferentes aspectos de la personalidad y las relaciones desde una perspectiva única. Los ejemplos que da la autora son un poco extremos, como extrema es su condición, y a algunas cosas cuesta verles el sentido desde un punto de vista neurotípico, pero algunos de los puntos se podrían escalar a las situaciones personales y vitales de cada uno.

Es todo un ejercicio de abstracción, sin embargo, y habría que hacer un esfuerzo para ponerlo en la práctica con cierto éxito. Los esquemas me parecieron bastante indescifrables, la verdad. También fuerza hasta el extremo algunos de los principios científicos que explica para ajustarlos a su exposición, sin profundizar demasiado en los conceptos porque el argumento se desmoronaría si lo hiciera.

Así pues, merece la pena por el punto de vista diferente y original, para conocer la visión del mundo y de lo que significa ser humano para una persona neurodiversa, pero hasta qué punto tiene una utilidad práctica para el día a día es algo que tiene que decidir cada uno en función de su situación.

Déborah F. Muñoz