Adolescer 2055

Opinión:

La academia teatral "Primera Toma" lleva desde 2013 formando jóvenes talentos del mundo de la dramaturgia. Ubicada en Madrid, forman a niños y jóvenes en el mundo de la interpretación y les ponen en contacto con el mundo profesional. En el año 2015 un grupo de adolescentes entre 13 y 19 años, juntamente con el escritor y dramaturgo Roberto Santiago, dieron con una idea sobre diferentes temas importantes para ellos - amor, sexo, futuro, amistad y muerte - que les serviría, posteriormente, para crear la obra de teatro que ensayarían para ese curso escolar y que luego lanzarían en los teatros de Madrid, Valencia y Barcelona principalmente. El resultado fue "Adolescer 2055", el cual fue representado por dos elencos distintos, entre los cuales destacaban las figuras de Javier Gutiérrez, Silvia Marsó o una jovencísima Ester Expósito. Obtuvo una gran acogida entre reseñas de bastidores, y la editorial SM ha lanzado sobre el papel la obra. 

Posee un inicio intenso y emocionante, jugando con la ignorancia del lector/a para ir jugando con él/ella. Somos testigos de seis jóvenes en una casa mientras en la calle suenan gritos, helicópteros y disparos. Momentos de apocalipsis en medio de una esperanza para ellos: ser acogidos por una familia; pues ellos viven casi desamparados en El Arca, un centro de acogida. El único requisito es conseguir el mayor número de votos, con la dificultad de que deben votarse entre ellos. Y, en medio de toda esta rocambolesca historia, una joven narradora, llamada Teresa, que indica que ya está muerta. 

La narrativa se desarrolla con mucha emoción y suspense. Engancha de principio a fin. Sin embargo, posee un final algo decepcionante, que no acaba de poner punto y final a una historia que da la sensación de que podría durar por muchos episodios. Roberto Santiago aprovecha las ventajas que proporciona el dinamismo y los constantes diálogos de las obras teatrales para crear una historia que apenas descansa, mezclada con misterio y confusión. Además, los personajes poseen un componente humano que les hace reconocibles y cercanos a lo que los lectores puedan tener en su vida diaria. Se tratan de chicos y chicas confundidos, en una época de su vida en la que los caminos se triplican. Los lectores encontrarán a figuras como un chico ciego que les deleitarán o que quizá les entristecerán. 

El libro está cargado de filosofía. Tras los diálogos, tras los momentos, tras la acción, se esconde una retahíla de mensajes que puede desencadenar centenares de debates. El hecho de que aparezcan tópicos como el amor o la violencia o de que la narradora juegue con los tiempos, hablando en pasado o presente o vaticinando el futuro, provocan que sea fácil celebrar una mesa redonda para dar a conocer diferentes opiniones. ¿Son los jóvenes culpables de sus malas acciones? ¿Son libres de su destino? ¿Puede amar alguien que no ha recibido nunca amor?

Roberto Santiago (Madrid, 1968) estudió Imagen y Sonido y también estudió Creación Literaria. Ha sido guionista, director de cine, director de teatro, escritor o redactor para agencias publicitarias. Su primera novela, El ladrón de mentiras, ya llamó la atención, pues fue finalista del Premio El Barco de Vapor. Y, desde entonces, ha publicado muchas obras infantiles y juveniles, entre las que destaca la serie Los futbolíssimos, que hasta la fecha consta de 20 episodios y cuya versión cinematográfica salió en 2018 y fue un éxito de taquilla. 

También ha cosechado grandes triunfos en el mundo del cine. Se encargó de la dirección de películas de renombre como El penalti más largo del mundo o El club de los suicidas. La primera de ellas fue nominada a mejor guion en los Goya 2006, galardón que al final no ganó y que se llevó El método.

Cristià Serrano