Abelardo

Opinión:

Casi desde el inicio, mirando sólo la portada y conociendo otras historias publicadas por Ediciones La Cúpula, sospechaba que me encontraría ante una historia enternecedora, emotiva y tierna. Y no me equivoqué. Pero además es preciosa, lo suficiente como para que valga la pena leerla y releerla. Y triste.

Imagen interior de la editorial:

Abelardo es un personaje lleno de curiosidad, quizás porque todavía es muy joven, pero esa juventud es la que la hace también darlo todo por una ilusión.

Dentro de su sombrero aparece cada día una nota distinta. Simplemente sale. Él no lo cuestiona. Nosotros tampoco, es la parte fantástica de la historia. Esas pequeñas sentencias son sabiduría pura, y a Abelardo no le pasan desapercibidas, pero menos aún al lector, pues cada nota está relacionada con la historia y el avance de Abelardo en su viaje y en su vida.

Como contrapunto está esa otra sabiduría, la del adulto y su experiencia, pero estos otros pensamientos están corrompidos por sus pasados, por el dolor o las decepciones, y te puedes encontrar con personajes machistas o algo misóginos en sus comentarios. Por suerte pasan dos cosas: una, que Abelardo sólo se queda con la parte bonita de lo que oye, y otra, que estos personajes adultos y varones, en algún momento dado, hacen algo bonito que nadie espera, por el pequeño Abelardo.

La historia es dramática e intensa, tanto que me pilló leyendo el final esperando mi turno en el ambulatorio, y ahí acabé llorando.

Esto ya depende de vosotros pero ahí va: he puesto el comic en adultos, pero por el tipo de historia podría perfectamente leerlo alguien menor de dieciocho años, sin embargo en esta historia se trata a las mujeres -aunque se enfoque todo en Epilia- de putas, de modo que cada uno sabrá quién lo lee en su casa. A mí me ha parecido maravilloso porque lo adorable que es Abelardo consigue la redención de Gastón, que me cayó mal desde el principio por sus comentarios misóginos. Pero todos pueden cambiar.

Os lo recomiendo mucho.

Anika Lillo