Maleficium

Opinión:

"Maleficium" se mueve entra la vertiente histórica y la de ficción gracias a esa posibilidad que dan las historias de brujas. El proceso más famoso en España fue el de Zugarramurdi, y posiblemente también el que más duró, aunque no voy a callarme que no fue en España donde murieron más inocentes (los que saben de estos temas son conscientes de que lo peor ocurrió en otros países europeos; en palabras de Jesús Callejo durante la entrevista que le hice por "Breve historia de la brujería", la cifra queda así: "en esos tres siglos que he comentado se ejecutaron a unas 50.000 supuestas brujas, pues bien, Alemania tiene el dudoso honor de haber matado a la mitad de ellas, en Polonia y Lituania a 10.000 y en Suiza a 4000. En cambio, en España se mataron a 59 brujas, en Italia a 36 y en Portugal a 4".

Cuando indico que se mueve también entre la ficción lo afirmo porque Patrick Ericson, en algunos capítulos, narra akelarres como se denunciaban falsamente y bajo tortura durante los juicios: incluye, por ejemplo, la presencia del demonio cabrío y el beso en el culo. Eso sabemos que no existió (de hecho existieron tres inquisiciones y en la que respecta a la "brujería" había dos tipos de reuniones, aquellas en las que se intercambiaban conocimientos de hierbas, y las otras que rendían culto a dioses paganos y disfrutaban de orgías, pero de ahí al supuesto beso a un demonio en el culo…)

No obstante está lo suficientemente bien documentado como para narrarnos algunas torturas reales, formas de descubrir si una era bruja (la marca del ojo, por ejemplo), y sobre todo en lo que respecta al personaje principal, el narrador: Alonso de Salazar y Frías, teólogo jurista del Tribunal del Santo Oficio, que siempre creyó que había más maldad y superchería en los asuntos de las denuncias por brujería, que otra cosa, y luchó por demostrarlo. "Maleficium" cuenta, precisamente, cómo intentó demostrarlo, pero empieza desde el principio.

Alonso de Salazar y Frías dejó toda la investigación del caso de las brujas de Zugarramurdi recogida en ocho volúmenes (así nos lo contó Nerea Riesco en la entrevista que le hicimos por "Ars magica" y que versaba sobre él), de modo que es posible documentarse sobre el tema, y Patrick Ericson se ha centrado más que nadie en el proceso pues nos cuenta con pelos y señales toda la historia sin introducir historias ficticias ajenas. Esta sí es una novela centrada únicamente en el proceso inquisitorial de Zugarramurdi.

La novela se lee con gran amenidad y está dividida en dos tipos de capítulos: el que narra el inquisidor, y el que narra la historia de las mujeres que fueron acusadas de brujería desde que la delatora, María de Ximildegui, llegara de Francia y se quedara a vivir con María de Yurreteguia para trabajar para ella. Actualidad -la de Alonso durante su investigación- y flashbacks cronológicos a un pasado cercano -la historia de las mujeres y cómo llegaron a ser denunciadas-.

A mí me ha gustado bastante porque resulta interesante y sin duda se lee con avidez, también por lo fiel que ha sido al personaje de Alonso de Salazar y Frías y por cómo ha estructurado la novela.

En "Maleficium" se nos describe muy bien la histeria colectiva, la maldad de quien se cree superior -en este caso en la piel de ciertos inquisidores-, la desvergüenza de las personas que sin tortura de por medio acusaba a quienes les caían mal o de quienes querían sacar algo, o lo claro que quedó que bajo tortura se puede afirmar que una vuela en escoba si hace falta.

Leedlo, conoceréis -si no lo conocéis ya- un trocito de nuestra España profunda en la Edad Media, y también un personaje que no hay que olvidar, el de Alonso de Salazar y Frías. 

Anika Lillo